lunes, octubre 28, 2013
BESTIAS ETARRAS
Bueno, ya sé, seguro que habéis dado un respingo al leer el título... acostumbrados a que os hable de tonterías, el anuncio de un post serio seguro que os ha sobresaltado, y más sobre un tema que, en cierto modo, sigue siendo tabú en España.
Como bien sabéis, el lunes de la semana pasada salió a la calle la etarra Inés del Río, en cumplimiento de la resolución del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo que invalidaba la llamada Doctrina Parot.
Y como sabéis también, me gusta analizar la actualidad desde el conocimiento del pasado. En este caso, al ver a esta mujer, que nunca ha mostrado arrepentimiento ni ha pedido perdón, me han venido a la mente enseguida dos protagonistas de mi libro, BESTIAS NAZIS. LOS VERDUGOS DE LAS SS, Ilse Koch e Irma Grese, que tampoco se mostraron nunca arrepentidas. Ambas fueron también dos mujeres que destacaron por su desprecio por la vida humana y su crueldad, a pesar de su aspecto inofensivo. Lo mismo ocurre con Inés del Río, que en la foto hasta parece buena persona, resulta difícil de creer que tenga a sus espaldas 24 asesinatos.
Pero el caso de Inés del Río no es el único. Es conocido también el caso de Idoia López Riaño, alias "La Tigresa", que con apenas 20 años cometió su primer asesinato, de una lista que se elevaría a 23 personas.
Significativamente, las dos criminales nazis salen bien paradas de la comparación, ya que tanto Ilse Koch como Irma Grese alcanzaron su puesto de responsabilidad casi por azar, podríamos decir que hasta cierto punto no lo buscaron, sino que vino a ellas. En cambio, ambas terroristas eligieron libremente ese camino y, una vez en él, lo transitaron con decisión, mucha sangre fría y muy pocos escrúpulos.
No tengo referencias de cómo era la vida de las dos etarras antes de iniciar su carrera criminal, pero imagino que sería tan convencional como la de las dos nazis. El cómo estas jóvenes pudieron convertirse en lo que fueron es algo que escapa a nuestra comprensión.
Pero este episodio de la excarcelación de Inés del Río, y las que están previstas a partir de ahora, tiene a otros protagonistas, que son las víctimas, que se manifestaron este domingo y que son quienes me han llevado a publicar esta entrada. Realmente, me entristece mucho la situación de este colectivo, porque no auguro para ellos nada bueno, y siento decir esto. Me temo que van a ser progresivamente arrinconadas y olvidadas, en un proceso en el que hay bastantes interesados en acelerar.
El motivo es que a la actividad de esta organización, que dura cinco décadas y ha causado la muerte de 829 personas, aparentemente se le ha puesto fin con un armisticio, cuando parecía que la victoria por parte del Estado estaba más cerca que nunca. Es como si, en la Segunda Guerra Mundial, con los rusos a las puertas de Berlín, los alemanes hubieran arrancado de los Aliados un armisticio, por el que los nazis conservasen ámbitos territoriales de poder en la Alemania de la posguerra, pudieran poseer el control de una parte de los fondos destinados a la reconstrucción, y los criminales de guerra no sólo escapasen a su castigo sino que obtuviesen un cierto reconocimiento. Además, en esa ucronía, los nazis hubieran obtenido una ventaja inmaterial pero tremendamente útil de cara al futuro, como es la capacidad de imponer su relato, tal como se dice ahora.
Si hubiera sucedido eso, es posible que las víctimas del nazismo y aquellos que murieron por conseguir una victoria que quedó aguada en el último momento hubieran sentido que su sacrificio fue inútil. En cambio, la derrota incondicional de Alemania logró que esos sacrificios tuvieran un sentido. Hoy, las ceremonias de homenaje a los soldados caídos en esa lucha son frecuentes, y las víctimas del Holocausto, por ejemplo, han recibido todos los reconocimientos.
Incluso los homenajes populares de que son objeto hoy día en Gran Bretaña los caídos en la Gran Guerra, en el Remembrance Day, logran dar la sensación de que aquella terrible matanza sirvió para algo.
En el caso que nos ocupa, el sacrificio de las víctimas de la ETA parece que no ha servido para nada. Y no sólo eso; intuyo que una parte no desdeñable de la sociedad española considera a ETA ya como parte de un terrible pasado que, lo mejor que se puede hacer, es olvidar. En ese escenario, las víctimas aparecen como un incómodo recordatorio de que un día se aceptó un final pactado para acabar con ese derramamiento de sangre, sin vencedores ni vencidos.
No sé si una derrota incondicional de la ETA, con la captura de sus arsenales de armas y la detención de sus últimos integrantes, y la deslegitimación histórica de su lucha, hubiera servido para calmar el dolor de las víctimas, pero es posible que algunos hubieran encontrado un sentido a su sacrificio. Por el contrario, creo que no me equivoco mucho si pronostico que los presos etarras que vayan saliendo de la cárcel se encontrarán con una importante red de apoyo, tanto moral como económico.
El tiempo dirá si ese final negociado promovido por el anterior gobierno, y certificado por el actual, fue la mejor opción. Sin duda, nos falta perspectiva histórica e incluso geográfica para juzgar, pero no hay que olvidar algunos precedentes: la Primera Guerra Mundial concluyó con un armisticio por el que Alemania no fue derrotada totalmente, y una generación más tarde volvió a las andadas; Irak fue derrotado de forma incompleta en 1991, lo que llevó a reeditarse el conflicto en 2003.
Esperemos que, en este caso, la historia no se repita, pero no soy muy optimista al respecto...
EDITO: Hoy martes se publica en ABC.es mi entrevista para este medio, en la que hablo de mi último libro, la podéis leer AQUÍ.
Con todo el respeto, es irracional pensar que la sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo forma parte de las supuestas cesiones de los gobiernos españoles a ETA.
ResponderEliminarLa doctrina Parot fue un error, simplemente.
Un saludo.
Pues que más decir a lo que has escrito. Opino que lo has clavado. También a mi me da esa sensación de que las víctimas y sus familiares empiezan a ser "molestas". En cambio los asesinos tienen un apoyo incondicional, económico y moral por parte de sus seguidores.
ResponderEliminarNos falta perspectiva histórica, pero los ejemplos que pones me parecen acertados.
Con el terrorismo solo hay una politica correcta, derrota total y cero concesiones. Ojala nuestros gobiernos tuvieran eso claro y dijeran con voz alta y clara "España no negocia con terroristas".
ResponderEliminarSaludos.
1. La doctrina Parot iba contra los derechos humanos y lo único que se ha hecho es que la ley española no vaya en contra de los derechos humanos.
ResponderEliminar2. Decir que porque no se derrotó a Irak en 1991 hubo otra guerra en 2003 es tremendamente reduccionista (sobretodo, porque fue Estados Unidos quien lo activó todo en segunda instancia).
3. Me encanta la historia y la II Guerra Mundial me atrae sobremanera, pero que TODO siga sus mismas directrices... Pues no. La historia sigue ciertos patrones, pero no hace falta forzarlos.
Aclaro, Nonsei y xirly; yo no seré el que diga si la doctrina Parot se ajusta a derecho o no, no soy jurista.
ResponderEliminarLo que afirmo es que el actual gobierno español no ha hecho nada de lo que estaba a su alcance para tratar de que ese veredicto se ajustase a lo que en su día dictaminó el Supremo y el Constitucional, que avalaron la doctrina Parot.
Tengo entendido también que el gobierno pudo haber cambiado hace unos meses al juez español, López Guerra, un hombre en sintonía con el anterior gobierno y contrario a la doctrina Parot, pero no hizo nada.
¿Qué acciones llevó a cabo el gobierno español para convencer -ya no digo presionar- a los magistrados del Tribunal de Derechos Humanos? Ninguna.
Además, Inés del Río fue de inmediato excarcelada, cuando todos sabemos lo lenta que es la justicia en España (además, sus beneficios penitenciarios, obtenidos siguiendo estudios en universidades del País Vasco, fueron obtenidos de manera fraudulenta, fácilmente impugnables).
En cambio, a Ruiz Mateos también le dio la razón el mismo tribunal y creo que a esta hora todavía no le han devuelto Rumasa.
Ese tribunal no tiene preeminencia sobre el tribunal constitucional, España no está obligada a cumplir sus sentencias, tal como dejó claro en 1994, con ocasión del caso Ruiz Mateos. En todo caso, existen muchas maneras de acatar una sentencia sin llegar a cumplirla, ejemplos a montones.
Item más: ¿Ha llevado a cabo el gobierno alguna iniciativa para ilegalizar al brazo político de Eta, cuando eso era lo que defendía estando en la oposición? No.
Total, quizás me equivoco, algo que hago con frecuencia; en su día, yo consideré un disparate poner a Guardiola de entrenador del Barça, y aposté por Mourinho.
Pero los americanos dicen que "si parece un pato, nada como un pato, y grazna como un pato, entonces probablemente sea un pato."
Por último, xirly, conocer algo de historia es muy útil precisamente por eso; siempre encuentras ejemplos para defender tu tesis, o la contraria.
Pues yo no veo el pato por ningún lado.
ResponderEliminarA Ruiz Mateos no le dio la razón el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Al contrario, falló que la expropiación de Rumasa se hizo de acuerdo a la ley española y rechazó su petición de compensación económica. Lo que pasa es que reconocía que se habían vulnerado sus derechos porque su caso no se había resuelto en un plazo razonable de tiempo (eso que dices de que la justicia es lenta en España). Pero eso no implicaba quitar la razón a los tribunales españoles. Ruiz Mateos perdió en Estrasburgo, aunque hayan estado 20 años diciendo lo contrario.
Y sí, la justicia es lenta, pero desde que hay una sentencia que insta a hacerla efectiva en el menor plazo de tiempo posible, no hay ninguna razón para demorarla. Ni ninguna excusa, supongo. Los beneficios penitenciarios los conceden los jueces. Si eran impugnables, haberlos impugnado en su momento. No sé quién lo puede hacer, pero en todo caso lo tienen que decidir los jueces de vigilancia penitenciaria, a los que hay que suponerles un mínimo de independencia. Porque supongo que no todos son amigos de ZP.
Porque esa es otra. Hacer de algo meramente anecdótico (que uno de los diecisiete jueces del tribunal de Estrasburgo sea cercano al PSOE) la prueba definitiva de la ignominia. Pensar que desde un gobierno que perdió el poder hace dos años se puede manipular un alto tribunal internacional porque controla 1 de sus 17 miembros es... irracional. No extraña, porque va en la línea de culpar de todo al gobierno anterior, el que “traicionó a los muertos”, cuando en realidad es el que impulsó la aplicación de la doctrina Parot.
Un saludo.
Jesús, evidentemente que saber historia sirve para encontrar paralelismos, pero a veces creo que los forzamos un poquito, como creo que es este caso.
ResponderEliminarY por lo de Guardiola y Mourinho... Es de valientes admitir que apostaste por el segundo, jejeje.
Hola Jesús me alegra enormemente estar totalmente de acuerdo contigo, subscribo punto por punto todo lo que has dicho, más vale hacerse amigo del "matón" que enfrentarse a él, no sea que al final vaya a fastidiar la fiesta y el pastel, y a los pobres muertos y familiares ya los irán callando poco a poco, porque como no utilizan pistolas no hay nada que temer.
ResponderEliminarUn indignado más.
Un abrazo.
ResponderEliminarBuenas Jesús, sigo con interes tu blog y tengo una opinión propia sobre la doctrina Parot.
Sencillamente estaba mal redactada. Lo mínimo que se le puede a un Estado de derecho serio es que redacte leyes acordes al derecho internacional, y está no lo era. El motivo es claro. A finales del siglo pasado Aznar descubre los reditos electorales qque da el apoyo a las victimas del terrorismo de ETA y se sube a ese carro. Cuando Rodriguez Zapatero hereda el cargo, sigue a lo mismo que su predecesor y es a Rajoy al que le obligan a derogar algo mal redactado a sabiendas.
Ines del Rio tenía que haber salido de la carcel en el 2008 ya que fue juzgada por el Codigo Penal heredado del franquismo. Ese mismo franquismo que no sufrio un juicio de Nuremberg como el que juzgo a los máximos dignatorios nazis que quedaron vivos tras la caida del III Reich.
Con esto de la doctrina Parot queda claro que en España hay varias clases de victimas: los de primer rango (ETA), secundarios como los del 11M, a los que no se califica ni como victimas (GAL, terrorismo de Estado); y por último los que continuan en las zanjas por diversos lugares a lo largo y ancho del pais (todavia se sacan huesos de cuando en cuando de la Guerra CIvil)
Luego hay otro aspecto que me gusta mucho de este debate. Los excarcelados de ETA tienen que arrepentirse de sus crimenes. Perfecto. Me parece bien. Se van a arrepentir como Tejero por perpetrar un golpe de Estado, o como Amedo por el GAL. Creo que el codigo penal que se aplica a todos los casos es el mismo. ¿ O no?
Felicidades por el blog.
Lector.
Gracias por aportar tu opinión sobre el tema de debate, Juan, un saludo.
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