miércoles, febrero 17, 2010

Los Juegos de Garmisch-Partenkirchen (3ª Parte)


Pues vamos con la tercera parte de esta mini-serie dedicada a los Juegos de Invierno de 1936. Hoy hablamos de la que fue considerada Reina de los Juegos, la patinadora Sonja Henie, de 23 años.

Sonja llegó a la Olimpiada como gran favorita para hacerse con el oro en patinaje artístico, puesto que, pese a su juventud, ya había logrado sendas medallas de oro en los Juegos de 1928 y 1932. Incluso había llegado a participar, con tan sólo 11 años, en los Juegos de 1924, celebrados en Chamonix, como campeona de su país. A los 14 años ya era campeona del mundo.

Su increíble precocidad se explica por el empeño de su papi, un próspero comerciante de pieles, en convertir a su niña en una celebridad del deporte. Para ello no dudó en contratar a los mejores entrenadores del mundo, incluyendo a la célebre bailarina rusa Tamara Karsavina. Eso sí, la nena no desaprovechó esas facilidades y cumplió con creces las altas expectativas de su progenitor.

Sonja fue la primera patinadora en adoptar como vestimenta la faldita que llevan las patinadoras actuales y en realizar elaboradas coreografías. Su técnica innovadora y su estilo glamuroso transformaron el deporte del patinaje y la convirtieron en una leyenda de esta especialidad. Por si fuera poco, también fue una aceptable jugadora de tenis.



La patinadora llegó a Garmisch-Partenkirchen en la cresta de la ola de su popularidad, lo que obligó a la policía alemana a controlar a la gran masa de aficionados que quería verla de cerca. La noruega encandiló a todos los espectadores con su gracia innata y su perenne sonrisa, contradiciendo el estereotipo de la fría mujer nórdica.

Sin embargo, en las filmaciones que se han conservado de sus actuaciones sorprende la aparente tosquedad de sus ejercicios, muy alejados del perfeccionismo del patinaje artístico que se ve hoy día, pero en aquella época las evoluciones de la pizpireta noruega debieron parecer sensacionales...



Tras su medalla de oro conseguida en Garmisch-Partenkirchen, Sonja consideró cumplido su ciclo olímpico y decidió pasar al profesionalismo, participando en diversos espectáculos sobre hielo en los que lograría gran éxito, sobre todo en Estados Unidos, en donde llegaría a ser una celebridad; una estrella del Paseo de la Fama de Hollywood lleva su nombre.

Pues mañana, el último capítulo.

14 comentarios:

Mario Tenorio dijo...

Hola a todos:
Qué buena entrada y con video. En serio. No conocía la historia de la patinadora y me ha parecido cuanto menos interesante; he buscado en los comentarios del video de youtube y hay de todo tipo. La verdad es que voy a googlear más cositas sobre la chica de las cuchillas y la faldita.

¡¡Pedroboso,qué semanita, ahora sin luz en Tenerife!! caray, como JH en Barcelona.

Saludos desde el sur

pedroboso dijo...

Lo cierto es que la patinadora es guapa, su foto en blanco y negro y la pose de la época, recuerda a las bellezas y estrellas de Hollywood como Lauren Bacall, Greta Garbo o Bette Davis... Hombre! hay que ponerse en el lugar de los señores de los años 30 y 40 y los gustos femeninos que tenían. Dede luego me parece una belleza más natural y real que la que hay ahora, todo silicona, tatuaje y piercing... me quedo con los años 40, sorry...

Mario, pues sí, tenemsom temporal en Canarias, pero creo que por tu tierra la cosa no va mejor, sobre todo por Cadiz y Málaga. La luz ya está OK y la previsión del mal tiempo es que empieza a remitir hoy.

Saludos!

Mario Tenorio dijo...

Pedroboso, aquí hay alguna zona rural que el vehículo más utilizado es la Zodiac, de verdad.

Saludos desde el sur.

Ludovica dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ludovica dijo...

A mí me ha recordado un animalito amaestrado. Me pregunto qué pensaría la persona a la que le tocaría patinar después: lo digo por lo que le hace al hielo con las cuchillas.

Humberto dijo...

¿Y qué le hace, Ludovica? ¿Y lo del animalito amaestrado?

Me he quedado un tanto "pillado".

Ludovica dijo...

Pues mira, Humberto, con esos pasitos que da con la punta de las cuchillas y con esas frenadas que parece que está esquiando, hace agujeritos que aumentan las probabilidades de que te pegues una l.... Y lo del animalito amaestrado ¿nunca has visto a Pancho en los anuncios de TV?

Jesús Hernández dijo...

Otro libro con sorprendentes "revelaciones", en este caso sobre Eva Braun; AQUÍ tenéis una entrevista con la autora.

Después de leerla te das cuenta de que la venta de humo al por mayor sigue cotizando alto...

Humberto dijo...

Gracias Ludovica por la aclaración.

En cuanto a los de Eva Braun... eso peinso yo... humo.

Ludovica dijo...

No tengo claro que queréis decir con lo del humo, pero sí que Eva Braun pudo ser peligrosa a su manera, tanto por callarse ante lo que ocurría como lo que pudo decir, a fin de cuentas no sería la primera compañera de un hombre poderoso que dirige las cosas desde la sombra, sino pensemos en Diana de Poitiers o Isabel de Farnesio, por ejemplo.

pedroboso dijo...

En cuanto al nuevo libro de Eva Braun, mi opinión es, la "del humo". La autora quiere vender libros y la BBC inglesa darse más publicidad, sobre un nueva teoría. Todo vale con tal de hacer negocio.

Eva Braun no tuvo ninguna importancia histórica en cuanto al devenir de los acontecimientos. No tuvo ni voz ni voto en cuestiones políticas, civiles o militares. No tuvo influencia sobre Hitler en su toma de decisiones ni tampoco lo ayudó a llegar al poder. Simplemente fue su compañera fiel y leal, pero nunca le interesó la política.

Un ejemplo de su NO influencia sobre Hitler: En abril del 45, no pudo evitar el fusilamiento del SS Hermann Fegelein, ordenado por el Führer tras la traición de Himmler, que a la sazón era el cuñado de Eva. Fegelein estaba casado con Gretl, la hermana de Eva, y además estaba embarazada. Eva le imploró el perdón para su cuñado y Hitler fue inflexible.

Saludos

Ludovica dijo...

Una explicación muy interesante: no recordaba yo lo del cuñado. Si cuando dicen que la relación con los cuñados no suele ser muy fina es por algo.

Humberto dijo...

En este asunto, creo que no hay duda.
Que yo sepa, ninguna fuente histórica cita nada en absoluto acerca de Eva Braun, y ni mucho menos que expresara opinión alguna.

Si hubiera tenido influencia, le hubiera sido imposible adoptar esa posición "fantasma".

Todo apunta a que se trataba de una mera compañera.

No obstante, Hitler era muy reacio a dejarse influenciar. ¿Os imagináis a su compañera manejándolo entre bambalinas?

Sencillamente, imposible.

Un saludo a todos.

Mario Tenorio dijo...

Hola a todos:
Totalmente de acuerdo con pedroboso y Humberto. Eva B. no influyó en nada en las grandes decisiones tomadas por el dictador. Es más, ya tuvo ella bastante con intentar estar cerca de él cuando se le permitía y salir de depresiones e intentos de suicidio por lo que ella entendía que eran dejadez en su relación con Hitler. Definitivamente, fue Eva Braun, no Evita Perón.
Saludos desde el sur.