jueves, marzo 31, 2011

Viaje a Cracovia VI. Auschwitz I (2ª Parte)



Bien, tenía pensado escribir la entrada controvertida, pero como tengo algunas dudas de cómo enfocarla, vamos con otra dedicada también a Auschwitz I, pero en este caso a los objetos personales de los internos, y que fueron encontrados por los rusos cuando liberaron este campo de concentración.

La exposición de estos objetos se encuentra en uno de los edificios del campo; posiblemente, sea la visión más impactante. Detrás de cada uno de esos objetos hay una historia personal de la que nada se sabe, pero que se puede imaginar.

Lo que sorprende un poco es la obsolescencia de las instalaciones que acogen esta exposición. Hay otros edificios que están modernizados y ofrecen un concepto museístico actual, pero este en concreto no. Supongo que tendrán prevista su modernización, aunque ese abandono generalizado proporciona una sensación de desamparo a estos objetos acorde con la trágica naturaleza de lo expuesto.

Paso a poneros las fotos, que no precisan de muchos comentarios, aunque sí que debo pediros disculpas por la deficiente calidad de las imágenes, pero no conseguí hacerlas mejor... así que clickad en las fotos para tratar de verlas con más detalle.

Aquí, más maletas con los nombres de sus propietarios, y cestos de mimbre:



Montañas de zapatos tras una vitrina:



Prendas de vestir y zapatos infantiles:



Montañas de gafas:



Y si no tenéis suficiente, la vitrina más tétrica, la dedicada a los aparatos ortopédicos:



Bien, creo que el cuerpo no se os habrá quedado muy bien: para el fin de semana prometo poner una entrada un poco más alegre...

Por cierto, NOTICIA: Esta noche a las 22.00, en Antena 3, preestrenan la famosa serie de Steven Spielberg THE PACIFIC. Si no lo he entendido mal, esta noche dan los tres primeros capítulos y luego la serie pasa al canal Nitro -también de Antena 3-. El día 6 de abril volverían a dar estos tres capítulos y a partir del 7 seguiría la serie. Yo no lo voy a ver porque Antena 3 siempre pone un montón de anuncios y me temo que en Nitro harán lo mismo; un amigo me tiene que pasar la serie en DVD, así que prefiero verla así, pero bueno, si queréis verla, ya sabéis.

martes, marzo 29, 2011

Viaje a Cracovia V. Auschwitz I (1ª parte)



Bien, disculpad la tardanza en subir otro post; tengo mi atención centrada en unos asuntos personales y tengo este frente descuidado... Pero, por respeto a los que entráis a diario, al menos os dejaré ahora una parte de lo dedicado a Auschwitz y en la próxima trataré los asuntos más controvertidos, que seguro que motivan un interesante debate...

Pues lo primero es remarcar una cosa que para la gran mayoría de vosotros no es necesario explicar, porque lo sabéis de sobra, pero para el gran público, sí. El tema es que "Auschwitz" son en realidad dos campos de concentración totalmente distintos; Auschwitz I y Auschwitz II, también conocido por Auschwitz-Birkenau (todavía habría un Auschwitz III, conocido por Monowitz). Auschwitz I se encuentra prácticamente en el casco urbano de la población de Oswiecim, y eran unos antiguos cuarteles del ejército polaco; sus construcciones son de ladrillo y de varios pisos.

En cambio, Auschwitz II está a unos tres kilómetros de Oswiecim, en una llanura en la que no había nada, en un terreno blando, y en el que se tuvieron que construir los barracones.

Esto lo digo porque, aunque estaban muy próximos, no tiene nada que ver el concepto de uno con el de otro. Cuando por ahí se lee "fue enviado a Auschwitz", tendrían que aclarar a cuál de los dos, ya que son dos campos muy diferentes.

Pues vamos con información práctica, para que os sea de utilidad si tenéis pensado ir allí. Muchos dicen que es mejor evitar la marabunta de turistas, y que por tanto es mejor ir bien temprano. Yo creo que se exagera; aunque hay turistas, la mayoría van en grupo, así que si en un momento hay mucha gente...



...te esperas unos minutos y se van, quedándote solo, así que tampoco es para tanto.



Por tanto, mi propuesta es -si os alojáis en Cracovia- levantarse tranquilamente a las 8.00, desayunar y tal, e ir a la estación de autobuses -que está junto a la del ferrocarril-. Allí cogéis el autobús de la compañía PKSIS que va a Auschwitz a las 9.30. El precio son 20 zlotys (5 euros) ida y vuelta; se paga al conductor.

El camino es agradable, ya que discurre por carreteras locales y comarcales, atravesando campos y parando en pequeños pueblos. Se llega a Auschwitz I a las 10.50. Una vez allí, os dirigís directamente a la entrada.

Yo he leido por ahí que no se puede hacer la visita si no es con guía, y que sólo puede uno entrar por su cuenta a partir de las 15.30. Pues de eso nada; la entrada es gratuita; en un cartel dice que de todos modos hay que reportarse en taquilla con fines estadísticos, pero yo no fui a la taquilla por si acaso y entré tal cual.

Puedes sacar una entrada para ver un documental, no recuerdo el precio, pero era muy bajo. También puedes hacer la visita con un guía en español por sólo 10 euros, a las 12.20.

Desde allí salen los autobuses lanzadera gratuitos a Auschwitz-Birkenau; creo que salían cada hora, así que mirad los horarios antes de entrar en Auschwitz I para no tener que estar luego esperando. Mirad también con mucha atención los horarios de regreso del autobús de Cracovia; lo digo porque junto a las horas hay una serie de claves (circula en domingo, o determinados días, etc.) que causan confusión. De hecho, yo me equivocé y por lo menos una docena de personas también, pues estuvimos esperando en vano el autobús que salía a las tres al no habernos dado cuenta de que sólo circulaba los domingos.

Bien, dicho esto, vamos con las fotos. Siento que sean las fotos típicas y que no os aporten nada nuevo.







Zapatos de los que fueron confinados en el campo:



Las maletas, con los nombres de sus poseedores, que no sabían que no volverían a verlas:



Pues de momento, esto. ¡Ah! no me preguntéis lo que sentí alli y todo eso, es lo que todo el mundo me ha preguntado... pero bueno, ya lo explicaré cuando hable de la visita a Auschwitz-Birkenau.

viernes, marzo 25, 2011

Interludio: El Pez Hitler

Bien, muchas gracias por vuestras aportaciones en el post anterior. A ver si entre todos conseguimos desentrañar la verdad en este alambicado y controvertido asunto de si Amon Goeth disparaba o no desde su balcón.

Ahora os iba a hablar del otro highlight de mi viaje: la visita a Auschwitz, que la verdad es que me entusiasmó, si se puede decir eso de un campo de concentración. Pero como estamos a las puertas del fin de semana, lo dejamos para más tarde y vamos con algo más soft...

Supongo que todos conocéis esa web, ya mítica, de los gatos que se parecen a Hitler... y que muestra reencarnaciones felinas del Führer:





Pues resulta que ahora hay también peces que se parecen a Hitler... El matrimonio formado por Chris Schatynski de 27 años y su esposa Sarah de 29, de Manchester, tiene en su acuario este inquietante pececito:



Se ve que este Adolfish -como le ha bautizado el diario sensacionalista The Sun- llegó a su acuario después de que su hija de cuatro años, Ellena, lo ganase en un sorteo que se celebró en una feria.

Sarah manifestó al tabloide que cuando colocó el Adolfish junto a los otros peces temía que se adueñase de inmediato del acuario, pero parece ser que hasta el momento eso no ha sucedido, lo que desmentiría que se tratase de la reencarnación ictícola del Führer.

Lo que sí ha pasado es que alguno ya ha aprovechado el juego que da el pececito en cuestión:



Pues venga, la semana que viene hablamos de temas más serios...

Por cierto, echadle un vistazo a este blog, que me parece especialmente interesante: TRAS EL COLAPSO FINAL. Va del tema survivers, que tiene mucho predicamento en USA. Además, su autor es mi hermano, así que todo queda en casa...

martes, marzo 22, 2011

Viaje a Cracovia IV. La bala mágica de Ralph Fiennes



Bien, seguimos con la crónica de mi viaje a Cracovia. Y vamos con uno de los platos fuertes, la casa de Amon Goeth, el nazi malo malísimo protagonizado por Ralph Fiennes en La lista de Schindler.

Todos recordáis a un Ralph Fiennes algo fondón disparando a los internos del campo de Plaszow desde el balcón de su casa... pues bien, la casa continúa en pie, y además está en venta:



Aquí, la casa desde otro ángulo:



Pero la gracia era ver la parte de atrás de la casa, para contemplar el balcón desde el que supuestamente Amon Goeth disparaba su fusil con mira telescópica. Sin embargo, eso que parece tan fácil resulta un poco complicado, ya que hay que dar un rodeo; hay que ir hasta el camino que sale de la "Casa Gris" y comenzar a triscar por el monte como una cabra hasta dar con la casa. Tened presente que igual tardáis un buen rato en localizarla, a mí me pasó.


Aquí, algunas de las fotos que tomé del famoso balcón, en plan paparazzi...







Pues bien, lo que sorprende al ver la parte de atrás de la casa es que el escenario real no tiene nada que ver con lo que se puede ver en la peli. Como bien apuntaba Bressend, detrás de la casa hay una colina muy alta, casi una montaña.

Estas fotos están tomadas desde ese altozano; podéis ver la casa de Amon Goeth al fondo.





Y si véis el mapa que hay allí, efectivamente, la explanada en la que estaban los barracones de los prisioneros (donde pone PLAC APELOWY) se encontraba al otro lado de la colina (la casa de Goeth es el punto rojo señalado con el número 50), por lo que era muy difícil que Amon Goeth pudiera disparar a los prisioneros desde su balcón, porque de hecho ni siquiera podía verlos.



Además, me fijé que en la montaña había afloramientos de roca, así que ésta no pudo formarse posteriormente, a no ser que el tiempo geológico se haya acelerado vertiginosamente en esa zona. Por lo tanto, si Amon Goeth conseguía acertar a disparar a los prisioneros desde su balcón no queda otro remedio que acudir a una nueva y aún más increíble teoría de la bala mágica.



Total, que -a no ser que me haya perdido algo- las escenas del campo de Plaszow son una invención de Spielberg. Y esto nos lleva a un interesante debate; ¿es ético mezclar ficción y realidad en este caso?

Como sabéis, la película se rodó en blanco y negro, y con secuencias de cámara al hombro precisamente para ofrecer sensación de realidad, como si se tratase de un documento histórico. Pero si lo que se explica de Amon Goeth es un fake, ¿cuántas invenciones más hay en la película? ¿Es de recibo que se produzca esa sustitución de la realidad por la ficción? Spielberg ya cambió totalmente los hechos reales en su película Atrápame si puedes, que no dejaba de ser una especie de comedia, pero en este otro caso, ¿está justificado?

Además, tengamos en cuenta que el libro original -que leí y me pareció mejor que la peli- es una novela, así que estamos hablando de una ficción basada en una ficción... Quizás haya que hablar de una "interpretación imaginativa de la realidad", aunque en mi pueblo a esto se le llama de otra manera...


Por último, no dudo de que Amon Goeth fuera la piel de Barrabás, y espero que los dioses le confundan allá en el infierno a donde haya ido a parar, pero creo que, si no disparaba a los internos del campo desde su balcón, pues no se le tiene que acusar de ello, me parece injusto.

Casi me dan ganas de abogar por la rehabilitación de este siniestro personaje...

jueves, marzo 17, 2011

Viaje a Cracovia III. El campo de Plaszow



Bien, como os dije, ese día me tuve que retirar sin haber conseguido encontrar el campo de concentración de Plaszow, el que aparece en la película de La lista de Schindler y que tiene al malo de Ralph Fiennes como comandante... Pero al llegar al hotel y consultar el Google Earth, además de comprobar lo cerca que había estado sin saberlo, pude por fin localizar su emplazamiento en el mapa. Al día siguiente fui a Auschwitz, pero al otro retomé la expedición en busca del huidizo campo...

Para encontrarlo, basta con ir bajando desde el centro histórico por la calle Starowislna, cruzar el puente sobre el Vístula y seguir por la misma calle, que cambia el nombre a Na Ziezdie y, girando un poco a la izquierda, pasa a ser Limanowskiego. Hay que pasar por debajo de unas vías de tren y a unos doscientos metros hay que tomar a mano derecha la calle Jerololinska, aquí:



Saliendo del centro, el paseo dura unos cincuenta minutos. Pero recomiendo ir después de visitar la fábrica de Schindler, que está a medio camino.

Pues a unos cien metros siguiendo por la calle Jerololinska tenéis el cartel que señala la entrada al campo. Al lado hay un plano del campo de concentración, pero que está sólo en polaco.



El cartel que señala la entrada al campo, en detalle. Está en polaco y en inglés.



Y aquí tenéis el plano del campo en detalle:



Bueno, en realidad no hay campo ni nada, es una extensión de montículos con algunos restos de construcciones. La zona está totalmente abandonada, y al parecer sirve de refugio a gente de mal vivir, ya que hay restos de fogatas, cascos de cervezas rotos y basura en general. Es una lástima que los polacos no hayan hecho un esfuerzo para dignificar la zona.


A la derecha del camino, antes de llegar a donde está el cartel, se puede ver esta construcción, que según el mapa polaco podría correspondar a la antigua estación ferroviaria que llegaba a las puertas del campo, pero no os garantizo nada.



Para que os hagáis una idea, avanzando por el camino en cuya entrada estaba el cartel, esto es lo que se puede ver:



Pues esto es lo que se podía ver antes en este lugar:



Aquí se ven restos de las construcciones del campo. Ya véis que está todo muy descuidado...



Y aquí, a la derecha podéis ver un edificio que pertenecía al campo. Según pude ver en el mapa en polaco, y utilizando luego el traductor de Google, era la llamada "Casa gris" y era utilizada como prisión. No sé más.



Tomando el camino de la derecha entraríais en el campo, siguiendo por el camino de delante llegaríais a la casa de Amon Goeth y si bajáis por el camino de la izquierda llegaríais al MacDonalds del que hablé en la entrada anterior.

A unos treinta metros entrando por el camino de la derecha podéis ver este pequeño monolito dedicado a un grupo de resistentes polacos muertos el 10 de septiembre de 1939, es decir, durante la invasión alemana y tres años antes de que se construyese el campo de concentración:



Pues eso, siguiendo recto por el camino que se ve en la foto de la "Casa gris", a unos doscientos metros, se encuentra la casa de Amon Goeth, desde la que Steven Spielberg puso a Ralph Fiennes disparando con su rifle con mira telescópica... os iba a hablar de eso, pero creo que el asunto merece que se le dedique una entrada...

martes, marzo 15, 2011

Viaje a Cracovia II. La fábrica de Schindler



Bien, después del prólogo de ayer, vamos a meternos rápidamente en harina. Uno de los puntos más atractivos para nosotros es la fábrica de Schindler. Se puede llegar desde el centro dando un agradable paseo de media hora; aparece en los mapas turísticos, así que no hay problema para encontrarla. A tenor de los autocares y la gente que había allí, ya forma parte de los recorridos turísticos habituales.

En noviembre del año pasado se inauguró allí un museo dedicado a los oscuros años de la ocupación alemana. El precio de la entrada son 15 szlotis, no llega a los 4 euros. La verdad es que el museo está muy bien, podríamos decir que presenta calidad británica, similar al museo de la resistencia que hay en Varsovia, que sorprende también por su gran calidad. Parece que los polacos se toman muy en serio su historia, y eso se refleja en esas extraordinarias instalaciones.

Aquí, el aspecto exterior que ofrece ahora:



Y, para comparar, una foto tomada en aquella época en la puerta de la fábrica, con Schindler posando junto a sus trabajadores para celebrar los cuatro años de la empresa:



A continuación podéis ver algunas fotos de lo que se puede ver allí. Como veréis, todos los detalles están muy cuidados, creando una ambientación que te permite trasladarte a aquella época.

Aquí podéis ver una vivienda atestada en el gueto de Cracovia:



Un cartel alemán dirigido a la población:



Escaparates como los que se podían ver entonces por las calles:



Mosaico de esvásticas:



Más esvásticas...



Un tranvía de los que circulaban entonces por las calles de Cracovia:



Las escaleras que conducen a la planta en la que se encuentra el despacho de Schindler:



El despacho de Schindler:



Composición artística en el despacho de Schindler, formada por cacharros como los que se fabricaban allí:



Mesa que hay en el despacho del contable de Schindler:



Escena de la peli que se supone que transcurre ahí:



Y, por último, aquí vemos un cartel de la estación de Cracovia cuando ésta era llamada Krakau por los alemanes:



Total, que me pareció un museo muy interesante, aunque para mi gusto hubiera preferido que la fábrica hubiera adquirido el aspecto que debía tener en la época, emplazando el museo en otro edificio. Los que visitan la fábrica esperan encontrarse con los escenarios de la película y, por tanto, decepciona un poco en ese sentido.

Una vez vista la fábrica, me dirigí hacia el campo de concentración de Plaszow (pronúnciese Puashof), que según un cartel turístico se hallaba a dos kilómetros y medio de allí. Si recordáis, ése era el campo cuyo comandante era Amon Goeth, interpretado por Ralph Fiennes. La gracia es que todavía permanece en pie la casa desde la que supuestamente Goeth disparaba a los internos del campo. Antes de dejar el museo, me fijé en un mapa de pared en el que se indicaba el lugar en el que se hallaba y me puse en camino...

Comencé a andar, andar... no sé cuántos kilómetros llegué a caminar, esperando encontrar el lugar, pero nada. Al final pregunté en un hotel y me dijeron que lo había pasado hacía ya mucho rato. Volví tras mis pasos pero seguí sin encontrarlo... así que, agotado, acabé metiéndome en un McDonalds para reponer fuerzas.

A todas éstas, todavía estaba bajo los efectos de una semigripe, a unos cero grados y nevando, así que decidí regresar y dejar la búsqueda de Plaszow para otro día. Lo que no sabía mientras me estaba comiendo un McChicken Bacon Onion era que la casa de Amon Goeth se encontraba a apenas unos doscientos metros de allí... pero eso ya es otra historia...