lunes, octubre 29, 2007

La tumba del pollo desconocido

A raíz del comentario en la entrada anterior de torocatala sobre los 2.000 monos que Marruecos quiso enviar a los norteamericanos para que los utilizaran como desactivadores de campos de minas, investigué un poco y encontré algunos hechos curiosos protagonizados por los animales en esta segunda guerra de Irak y en la primera.

Por ejemplo, en 2003 se envió al puerto iraquí de Umm Qasr un grupo de cuatro delfines adiestrados para buscar minas. Los delfines procedían de una base militar de San Diego, donde la Marina de EE.UU. tiene un centro de entrenamiento para 70 delfines y 20 leones marinos. Su misión fue utilizar su sonar y sus habilidades para detectar objetos en el agua y ayudar a los buceadores a localizar minas en el puerto.



Las unidades terrestres también usaron pollos y palomas para detectar posibles ataques con armas químicas y biológicas, de manera similar a como se usaban en el pasado los canarios en las minas para advertir de escapes de gas. Además, como decía, Marruecos ofreció 2.000 monos a los norteamericanos para ayudar a detonar minas de tierra. En esa labor se ve que también colaboró un destacamento de 1.400 perros propios del Ejército USA.


Esta utilización de los animales en la guerra ya se dio en la primera guerra del Golfo. Allí, la Marina puso en marcha su "Operación Gallina de Campo Kuwaití" (KFC, su acrónimo en inglés, que curiosamente coincide con el de la cadena estadounidense de pollo frito Kentucky Fried Chicken).

Estados Unidos mandó 43 gallinas para que fuesen a la batalla con los marines, quienes les denominaron "Artefactos Avícolas para la Confirmación de Elementos Químicos", puesto que la contaminación de los pozos de petróleo incendiados podría afectar a los equipos de detección de agentes dañinos. Las aves son más sensibles que los seres humanos a las armas químicas y biológicas, y si se enferman súbitamente los soldados sabrán que tienen que ponerse las máscaras de gas.



No obstante, todos excepto dos murieron al poco de llegar a Kuwait. Las fuerzas armadas los reemplazaron con 43 palomas, pero el misterio sobre el fallecimiento de los pollos no se ha develado. "Nadie sabe cómo murieron", afirmó Ken Griffin, un portavoz de la Marina en Kuwait. "Sólo oí que vinieron muy apretados en las jaulas y empezaron a morir tan pronto como llegaron aquí. Y no pudimos ayudar porque no hay nadie aquí realmente que sepa nada de gallinas".

Las 41 aves fueron enterradas al lado del cuartel central del regimiento y los soldados colocaron pequeñas lápidas de madera en sus tumbas. En una se podía leer "Capitán Popeye", en otra "Cabo Pecker" y otra era, simplemente, la tumba del "Pollo Desconocido" (!).

5 comentarios:

Nacho dijo...

Hola, la utilización de animales en la guerra es un aspecto muy poco conocido y habitualmente ignorado. Pero es un hecho que millones de animales sufrieron y sufren en las contiendas. Además, en momentos en donde prima más la vida humana, los animales son ignorados y abandonados a su suerte. No solo se utilizan en las guerras sino que en muchas ocasiones son abandonados a su suerte. Muchas veces se utiliza un lenguaje incorrecto como que "los delfines ayudan en la desactivación..." los delfines no ayudan, son obligados a ayudar, que es distinto. Y si la guerra es cruel para todos, lo es más para los animales no humanos que, por descontado, no han elegido ninguna guerra.

Angelsak dijo...

Bueno no hay que olvidar el uso de perros por parte del ejército soviético, para explosionar bajo los carros alemanes.
Hablando de todo un poco. Este año estuve en Fuerteventura y un conocido ya me aviso de la existencia de una base submarina alemana al sur de la isla, Al preguntar sobre el tema a una taxista me aseguro que Franco y Hitler acordaron que la isla sirviera de refugio para los alemanes que huían de la Europa de posguerra. Es cierto o hay mas folclore o leyenda de lo que parece???.

Jesús Hernández dijo...

Bien, el papel de los monos sería más o menos el mismo que el que se veían forzados a hacer los desertores soviéticos de la SGM que eran capturados. Les hacían caminar hombro con hombro a través de un campo minado y así las iban "desactivando"... Al menos, se ve que a los que sobrevivían les perdonaban y podían reintegrarse en el Ejército Rojo como si no hubiera pasado nada.

Por cierto, esta mañana en el kiosko me he comprado el libro PARACUELLOS-KATYN, de la colección de Planeta "Biblioteca de César Vidal", por sólo 7,99 eurillos, en una edición que para ese precio es bastante aceptable.

Otra cosa, por el Foro Segunda Guerra Mundial me he enterado de que RBA no saca finalmente su anunciada colección Osprey de la SGM, que lanzó en algunos kioskos de prueba. Se ve que no se vendieron o no se qué, pero están llamando a la gente que se suscribió para decirles que queda cancelada. ¡Una pena! Espero que no pase lo mismo con la colección que Altaya tiene previsto sacar de "Memorias de Guerra".

Y sobre la base de Fuerteventura, es un tema muy interesante pero que tengo pendiente, a ver si me pongo, empezando por leer la célebre novela de Vázquez Figueroa.

Jose dijo...

Je, pues según Sven Hassel, los polacos al inicio de la campaña utilizaban cerdos para desactivar los campos de minas, hasta que se dieron cuenta de que los cerdos valen dinero y empezaban a escasear...
saluditos

Miski dijo...

Hace tiempo he jugado bastante a los juegos de la saga Delta Force y creo recordar que en el Land Warrior aparecían blindados con unas jaulas adosadas, dentro de las cuales se distinguía gallinas...
Felicidades por el blog, temas muy interesantes.