jueves, mayo 28, 2009

Munich 72 (2ª Parte: La Encerrona)

Bueno, tras el paréntesis futbolero, retomamos la historia.

Como decía, los secuestradores quedaron convencidos de que iban a poder escapar a Egipto con los rehenes. A las diez y diez de la noche de ese 5 de septiembre, un autobús condujo a secuestradores y rehenes hasta el lugar en el que les esperaban dos helicópteros militares. Una vez allí, subieron a los aparatos y éstos levantaron el vuelo con destino al aeródromo en el que supuestamente un Boeing 727 de Lufthansa les esperaba para llevarles a Egipto.



Los secuestradores querían despegar desde el Aeropuerto de Riem, pero se les logró convencer de que era más práctico hacerlo desde la base militar de la OTAN en Fürstenfeldbruck, y al final accedieron. Como ya podéis imaginar, en realidad aquello iba a ser una ratonera; las autoridades alemanas habían decidido cargarse a los secuestradores y rescatar así a los rehenes.

En el aeródromo, todo estaba dispuesto para el asalto, aunque luego veremos que era todo bastante chapuza. La iluminación se había reducido para dificultar los movimientos de los secuestradores y cinco francotiradores alemanes estaban apostados para dispararles.

En el Boeing 727 se hallaban seis policías alemanes armados que iban a hacerse pasar por la tripulación. El plan era que estos policías capturasen o matasen a los terroristas que iban a inspeccionar el aparato antes de trasladarse con el resto de compañeros y los rehenes. En ese momento, los francotiradores abatirían a los terroristas que estarían aguardando en los helicópteros.

Pero este plan ya había comenzado con mal pie. Aunque resulte sorprendente, los alemanes estaban convencidos de que sólo había dos o tres terroristas. Sólo se enteraron de que eran ocho cuando salieron del edificio de la Villa Olímpica para subir al autobús.

Cuando los dos helicópteros estaban a punto de aterrizar, los policías que había en el interior del Boeing 727 decidieron -increíblemente- pirarse por su cuenta y riesgo, ya que creían que sólo iban a enfrentarse a dos o tres, y no a ocho. Y aunque ya sabían que eran ocho tíos, a nadie se le ocurrió llamar a más francotiradores; cinco tiradores debían matar a ocho. Así que, aunque acertasen de pleno a sus cinco objetivos, quedarían tres tíos ilesos que podrían esconderse o contestar disparando. Vamos, que a quién se le ocurre.



Los helicópteros aterrizaron a las 22:30. Al cabo de unos largos minutos de tensa espera, los terroristas sacaron a la pista a los cuatro pilotos, apuntándoles, rompiendo así el compromiso adquirido en las negociaciones de no tomar más rehenes.

Dos secuestradores caminaron entonces hacia el Boeing 727 y entraron en él, y al cabo de unos segundos salieron. Con toda seguridad, debieron quedarse helados al comprobar que el aparato estaba totalmente vacío. No había ni rastro de la tripulación; comprendieron al momento que los habían engañado como a chinos.

(Continuará)

4 comentarios:

Miski dijo...

putadaaaaaaaaaaaa!!!!....continúaaaaaaaaaa.......

Mario Tenorio dijo...

A partir de ese secuestro, se creó el GSG9 Grenzschutzgruppe 9 o Guardia Fronteriza, Grupo 9, especializado en operaciones especiales de secuestros con rehenes.
Saludos.

Gándara dijo...

UFFF... En estos casos miraría por internet a ver como acabó la cosa pero me está gustando tanto que me voy a esperar a la próxima entrega...

¡Desde que dieron el último capitulo de temporada de Lost tengo que quitarme el mono con algo!!!!

Likuid dijo...

No me gusta nada esto de darnos racionada la información... ;)