miércoles, febrero 05, 2014

Dr. OETKER; LA PIZZA CON PASADO NAZI


Seguro que todos conocéis estas pizzas, las Dr. OETKER, que podemos encontrar en cualquier supermercado. Yo probé una hace un tiempo y estaba bastante buena. Pero lo que entonces no podía sospechar era que estas pizzas tenían detrás un oscuro pasado nazi, el cual, obviamente, es soslayado en la sección Historia de la web de la marca.

La empresa Dr. Oetker tiene su origen en 1891, cuando un farmacéutico -supongo que de ahí viene lo de "doctor"-, August Oetker, comenzó a vender levadura en polvo almacenable que no alteraba el sabor de los productos horneados. Fue asimismo el primero en Alemania que desarrolló los envases desechables de levadura y mezcla para pudín.

Pues ahora, se ve que la familia Oetker, propietaria de la empresa, ha decidido escarbar en el pasado... y se ha encontrado con algunas sorpresas.

Por ejemplo, que el patriarca de la empresa, Rudolf-August Oetker, fallecido en 2007 a los 90 años, fue un oficial de las Waffen-SS, que fue adiestrado en el campo de concentración de Dachau. Había sido llamado a filas en 1940, pero al año siguiente se ofreció voluntario para entrar en las Waffen-SS. A los 28 años heredó la empresa familiar tras la muerte en un bombardeo de su padrastro, su madre y dos hermanastras. La empresa, Dr. August Oetker, se había incorporado a finales de los años treinta al Freundeskreis Richsfuehrer SS, un grupo de empresarios y oficiales nazis de élite reunidos por el jefe de las SS, Heinrich Himmler.



La empresa colaboró en la maquinaria de guerra germana creando empresas conjuntas en el área de alimentos con las SS y la Wehrmacht. Por ejemplo, entregó levadura en polvo y mezcla para pudín a los soldados durante la guerra.

La investigación llevada a cabo por encargo de la familia también ha confirmado que la empresa Kochs Adler, cuyo control mayoritario estaba entonces en manos de la familia, produjo proyectiles y piezas para ametralladoras MG 42, y que dotó a sus fábricas de trabajadores extranjeros esclavos durante la contienda. Su compañía química, Chemische Fabrik Budenheim, también utilizaba prisioneros de guerra.

Tras la muerte de sus padres en el bombardeo, a Rudolf-August Oetker le concedieron una licencia en octubre de 1944 para que pudiera dedicarse a gestionar la empresa. Durante la guerra, Oetker levantaría un holding empresarial de gran expansión internacional, cuya expresión la podemos ver en la sección de congelados del supermercado de la esquina.


Así que la próxima vez que os comáis una pizza Ristorante, os podéis imaginar que estáis en el frente ruso comiendo el pan horneado con la levadura proporcionada por Dr. August Oetker...

Pues un día de estos también os hablaré del pasado nazi de un licor alemán que ahora está de moda...


4 comentarios:

Conde de Salisbury dijo...

¿Ese licor no será el Jägermeister por una casualidad? Ja, ja, ja ... en los últimos tiempos mis alumnos hablan bastante de él así que con eso y su origen germano ... Volkswagen, Krupp, Hugo BOss y ahora esto. No hacemos carrera con el empresariado alemán.

Míster Carïbe dijo...

JH, esto es algo más común de lo que parece.

También marcas como la bebida Fanta, la empresa informática IBM o el diseñador Hugo Voss colaboraron con los nazis.

jjberdoy dijo...

Siempre los empresarios son amigos del que ostenta el poder.Fijaros los carros alemanes, fabricados por Krupp,Porsche,...y en general toda esa avanzada tecnología fue financiada por el regimen y esas marcas, muchas, aun siguen.

isra dijo...

¡que bueno! pensé que habías hecho un paréntesis en la escritura de tu libro y que como no tenías tiempo habías ido al carreful a por una de estas y nos ibas a comentar tus impresiones... me recuerda a la historia de la Fanta, cuando se las ingeniaron para sustituir a la coca cola que no la exportaban a Alemania.

Muy buena la historia y muy buenas sus pizzas.

No me imagino qué pasaría aquí si la SEAT o alguna gran empresa se hubiese decantado descaradamente por los nacionales...