lunes, octubre 26, 2015

¿CUÁLES ERAN LOS COCHES FAVORITOS DE LOS PROTAGONISTAS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL?






Vamos a comenzar la semana con otra entrada sobre una de las curiosidades recopiladas en mi último libro, el PEQUEÑAS GRANDES HISTORIAS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL.

Los que habéis leído ya mucho sobre el conflicto de 1939-45 seguro que disfrutáis encontrando algún dato nuevo, por nimio o fútil que éste esa.

Pues aquí vais a conocer algunos de esos datos que son ignorados por los historiadores en sus trabajos por su intrascendencia e irrelevancia, pero que los aficionados a la historia de la contienda valoramos especialmente.

¿Cuál era el coche favorito de cada uno de los grandes protagonistas de la Segunda Guerra Mundial?

Vamos a empezar con el Eje.

La marca alemana MERCEDES era la predilecta de Adolf Hitler y de la mayoría de jerarcas del Reich, como su ministro de Propaganda, Joseph Goebbels, el jefe de la Luftwaffe, Hermann Göring o el jefe de las SS Heinrich Himmler.




Edito para incluir tres fotos que me ha enviado Clemente, fiel seguidor del blog, que tomó él mismo en el Museo de la Automoción y Tecnología de Sinsheim (Alemania).

Estos dos Mercedes fueron utilizados por Hitler:






Y este otro por Heinrich Himmler:





Esa preferencia por Mercedes era compartida por el emperador de Japón, Hirohito, quien utilizaba un Mercedes-Benz 770. Este vehículo está expuesto en el museo Mercedes-Benz de Stuttgart:




En cambio, el arquitecto preferido de Hitler, Albert Speer, a quien le gustaba conducir, se decantaba por otra marca germana, BMW.

Speer sería el feliz poseedor de un BMW 328 Mille Miglia Bügelfalte, un coche de competición. El vehículo se lo quedaron los soviéticos como reparación de guerra y, tras varias peripecias, hoy día está en poder de un coleccionista particular.




En cuanto a Benito Mussolini, éste se decantaba por los coches italianos; gustaba de utilizar en los desfiles oficiales un elegante Lancia Astura de color granate.




Ahora vamos con los Aliados.

La mítica marca británica ROLLS ROYCE contaba entre sus admiradores con el general norteamericano Douglas MacArthur y el mariscal británico Bernard Montgomery. Aquí vemos a éste último.




No obstante, MacArthur se sintió atraído también por otras marcas. Asi, en Filipinas tuvo a su disposición este Cadillac de 1937.





En su país, MacArthur se hizo con este Packard Clipper de color verde oliva, fabricado especialmente para él, y por el que pagó 2.600 dólares con un cheque personal, pero la Packard tuvo la gentileza de devolvérselo y además se encargó de enviárselo a su destino en Australia.





En cuanto a Churchill, éste no se dejó seducir por los ostentosos Rolls Royce, convirtiéndose en un cliente asiduo de DAIMLER. A pesar del origen alemán de la marca, los vehículos de la británica Daimler Company Limited eran fabricados en su planta de Coventry.

Así, Churchill utilizaría un pequeño pero elegante descapotable Daimler DB 18 Drophead coupé, de color gris y chocolate, para hacer campaña electoral, dotándolo de dos altavoces en el capó.




El general Omar Bradley y el almirante Chester Nimitz, ambos norteamericanos, preferían un vehículo ligado al esfuerzo militar, el célebre JEEP.




El inefable general George Patton no podía conformarse con un simple Jeep; se decantaba por los CADILLAC.




El accidente que le costó la vida le ocurrió precisamente en el Cadillac de la foto superior, que fue reconstruido posteriormente, aunque mirad el estado en el que quedó.



AQUÍ podéis ver fotos del interior del vehículo.


El presidente estadounidense, Franklin D. Roosevelt, condujo durante muchos años un PLYMOUTH PHAETON, especialmente adaptado para ser conducido por él, afectado por la polio.



La marca favorita del general Dwight D. Eisenhower era PACKARD.

El fabricante de estos vehículos de lujo contribuyó al esfuerzo de guerra de su país con más de cincuenta mil motores, la mayoría de ellos destinados a la aviación; curiosamente, aunque el P-51 Mustang -el mejor caza fabricado durante la guerra- era conocido como el "Rolls Royce de los cielos", su motor fue fabricado por Packard.





Por último, Stalin también compartía gustos con Eisenhower, ya que, además de varios vehículos ZIS de fabricación soviética, poseía un Packard Super 12 de 1937.




Este coche tendría posteriormente una curiosa historia. Después de la guerra, Stalin se lo regaló al presidente búlgaro, Georgi Dimitrov. Tras la caída del Muro, en 1989, el Packard se quedó en el garaje de la casa museo de Dimitrov, en Sofía, pero el 2 de octubre de 1992 desapareció misteriosamente... para aparecer en 2002 en un museo privado de vehículos históricos en Roscoe, cerca de Chicago. Allí está expuesto junto al DeLorean de Regreso al Futuro, el coche de Batman o la ambulancia de los Cazafantasmas, por ejemplo.

Al parecer, el Packard de Stalin había entrado en Estados Unidos en 1997 como "chatarra". Su desaparición fue denunciada en su día incluso a la Interpol, por lo que, una vez localizado, las autoridades búlgaras han tratado de recuperarlo, hasta ahora sin éxito.


Estas son las preferencias que yo he podido recopilar, si conocéis alguna más, no dudéis en hacérnoslo saber.

3 comentarios:

Juanjo Ortiz dijo...

Interesante entrada. Yo amo los Jeep Willys.

Yo tambien soy un gran fanático de la Segunda Guerra Mundial y también tengo un blog, El Cajón de Grisom (www.elcajondegrisom.com) tambien con historias y curiosidades sobre el conflicto.
Tambien me gustaría felicitarle por sus estupendos libros y que su forma de contar la historia es la que me llevó a escribir mi blog. Gracias.

Un fuerte abrazo de un incondicional admirador.

Juanjo Ortiz
www.elcajóndegrisom.es

lbo dijo...

Interesante post. Me gustaría añadir algunas notas sobre Churchill y UK. No es muy conocida la pasión de Churchill por los coches, comparable a la de los puros, y se le podría considerar un pionero del motor. Ya en 1900 compró un Mors, francés. Y desde los años veinte tuvo dos o más vehículos. Por cierto que sí sucumbió a los Rolls Royce; se compró ya uno poco después del fin de la IGM.
Sobre los Daimler, conviene tener en cuenta que durante los 30-40 podían ser tanto o más ostentosos que los Rolls Royce. De Daimler fueron también los coches de la casa real británica hasta fines de los cincuenta y de mucha realeza de todo el mundo por esa época. Durante la IIGM, la Daimler británica fue una de las mayores y más implicadas empresas en el esfuerzo bélico aliado. Aparte de vehículos, entre otras cosas hicieron componentes de aviones o radares.

Ángel dijo...

Hola Jesús.

Sobre el P 51 Mustang "Rolls Royce del cielo"...

El caso es que creo recordar que en la película de Spielberg "El Imperio del Sol" un jovencito Christian Bale, subido en la torre de vigilancia del campo de prisioneros japonés, gritaba todo emocionado "¡P-51... El Cadillac del cielo!".

¿Recordaré mal? Tendré que ver otra vez la peli.

Oh, y hablando de películas y aviones de la WW2...
Como curiosidad diré que en "Pan" (ahora en cines) aparece un poco de Blitz sobre Londres. Lo cual hace que me pregunte por qué no se hacen más películas bélicas de la Segunda Guerra Mundial para poder aprovechar los medios que se tienen hoy en día y mostrarnos unas batallas que antes no se podían recrear en el cine ni por asomo.

Y lo dejo que me enrrollo.

Un abrazo.