miércoles, julio 18, 2012

EL OTRO LIBRO DEL VERANO


Sí, ya sé que voy descubriendo la sopa de ajo... pero vamos a recomendar otro libro que seguramente muchos de vosotros ya habéis leído -salió en 2007-, pero igual hay alguien todavía más despistado que yo y tampoco lo ha leído aún: LAS BENÉVOLAS, de Jonathan Littell.

Aunque ya conocía el libro, y había leído bastante sobre él, no me había animado al ser un libro bastante gordo, 992 páginas (!), y al tener una portada y un título tan disuasorios que creo que desanimarían al más voraz de los lectores, pero ahora, con el Kindle, ojos que no ven corazón que no siente, y me animo a leer libros que en formato tradicional ni se me ocurriría.

AQUÍ tenéis una nota sobre el libro y AQUÍ el artículo en la Wiki, pero hay por ahí info muy interesante.

Pues he comenzado a leerlo y la verdad es que no tengo palabras. Llevo un 25% y creo que ya puedo recomendároslo fervientemente. Como sabéis, es una novela que está escrita como si fueran las memorias de un oficial de las SS en el frente ruso.

Pues bien, os digo que me resulta imposible pensar que es una novela. Estoy convencido de que el autor, que tiene un año menos que yo -y vive en Barcelona-, ha hecho trampa; seguro que ha encontrado unas memorias inéditas de un oficial y las ha copiado. Y es que es imposible que eso sea inventado; está todo descrito con un nivel de detalle que ni la más colorida imaginación, dopada con LSD, puede recrear esa realidad. De hecho, a cada página me olvido de que es una novela, pienso que se trata de un libro de memorias, y tengo que decirme: "Oye, acuérdate de que esto es inventado...".


Así que, si no es la transcripción de unas memorias auténticas, debe haber habido un trabajo de documentación estajanovista, que sólo se puede abordar en equipo. Total; que a ver si me lo cruzo por Barcelona, le administro inadvertidamente el suero de la verdad y me confiesa el truco, porque debe de haberlo, a mí no me engaña este tío...

Por cierto, sugerencia; conforme el protagonista va avanzando por la Unión Soviética, es aconsejable seguir el recorrido en un atlas o, más operativo en estos tiempos, el Google Maps. El libro sirve también para comprender el colosal reto que le supuso a la Wehrmacht cubrir esas distancias y el éxito que fue ya llegar hasta Stalingrado, aunque aquello acabó luego como acabó.

Nada, así que ya tenéis otro libro ideal para atacar en la campaña de verano, porque es de esos libros que, o lo coges ahora que uno tiene más o menos tiempo o luego, con el ritmo normal de vida, se eterniza...

Así que con un imperdonable retraso de cinco años, si queda alguien que todavía no lo ha leído, queda conminado a leérselo este verano. No admito excusas.

4 comentarios:

Mario Tenorio dijo...

Si señor, buen libro. Me lo prestaron y la persona que lo hizo lo había leído dos veces.

El oficial protagonista, todo un cabrón (me apetecía escribirlo). Y sí, está muy bien escrito. El final...¡uuf! No digo más.

Saludos desde el Sur.

pedroboso dijo...

Pues a mi se me había pasado... ni lo conocía.

Tomo nota.

rafa dijo...

el libro me parece impresionante, y si no es por tus comentarios ni me acerco, ya que la portada o el hecho de ser novela me lo hacian poco atractivo.
sin embargo, solo por la "secuencia· en la que se habla del Caucaso y sus razas y lenguas, de una riqueza increible, ya mereceria la pena.
y el libro es mucho, mucho más...

Jesús Hernández dijo...

sí, Rafa, cuando pase un poco de tiempo volveré a leerlo, sin duda :)