miércoles, septiembre 12, 2012

CRONICAS DEL PERÚ I: CONSEJOS PRÁCTICOS (3ª parte)


Bien, vamos con la tercera parte de los consejos prácticos, dejando los otros dos capítulos para Machu Picchu y Nazca.

Pues nos habíamos quedado en Ayacucho; de ahí hay que ir a Andahuaylas, una pequeña población que constituye una útil parada de descanso en el largo y agotador viaje a Cuzco.

Ayacucho cuenta con la llamada terminal terrestre, que es la estación central de autobuses, sorprendentemente moderna. De ahí podéis coger los autobuses LOS CHANKAS, cuyo curioso nombre responde a que esta zona, en los tiempos de los incas, estaba habitada por los chankas.

En el autobús coincidí con una agradable pareja de Barcelona con la que me había cruzado en Huancayo y una holandesa que llevaba ya tiempo por Sudamérica, así que formamos el típico grupito de mochileros.

El autobús era sólo un poco menos destartalado que el anterior. Pues bien, la etapa Ayacucho-Andahuaylas, si no miente la Lonely Planet, es de sólo 164 kilómetros, pero el autobús empleó casi doce horas (!) en cubrir esa distancia... El motivo es que, aparte del lamentable estado de la carretera en algunos tramos, el autobús tuvo que hacer dos largas paradas en plena ruta, ya que hubo sendos cortes de tráfico para que se pudieran llevar a cabo los trabajos de acondicionamiento que en muchos tramos consistían en la construcción de una nueva carretera.

Aquí me podéis ver, todo sonriente, durante el primero de los cortes:


Durante el segundo, que duró cinco horas, mis amigos y yo tuvimos tiempo de refrescarnos los pies en un río cercano, tomar luego una cerveza bien fría sentados al borde de la carretera y contemplar cómo se ponía el sol en ese bonito paisaje.

A la llegada a Andahuaylas tenéis varios hoteles para elegir; el que escogimos al tuntún al final resultó -siendo generoso- más que espartano y, además, poco limpio, así que no lo recomendaré.

Y de Andahuaylas tomamos otro autobús de Los Chankas para Cuzco; esta última etapa, toda por carretera asfaltada, es cómoda y sin problemas. En Cuzco se llega a otra terminal menos moderna en la que hay que tener cuidado con las pertenencias. Podéis coger un taxi fuera, cuesta 5 soles (1,6 euros) al centro. Los conductores que vienen a cazaros en la puerta os pedirán 10.

En Cuzco me alojé en el HOSTAL RESBALOSA, situado en el mismo centro, en la calle del mismo nombre. Para llegar hay que subir una cuesta de unos cincuenta metros muy empinada y que si llueve debe resbalar, de ahí el nombre de la calle.

Este hostal es muy recomendable; la dueña es amabilísima y te hace sentir como el único huésped del hostal, además de que el precio es ajustado. Pero la perla del establecimiento es la fabulosa terraza, en la que se puede desayunar contemplando la hermosa ciudad de Cuzco a tus pies...

Y para cerrar este capítulo dedicado a los consejos prácticos, ahí va uno: llevad SIEMPRE encima una linterna. Os hará falta más veces de lo que pensáis. Yo os recomiendo esta ROMISEN, que con una única pila AA alumbra como un reflector de la Luftwaffe, y la podéis llevar sin daros cuenta en el bolsillo del pantalón.

En el próximo capítulo, Machu Picchu...

3 comentarios:

Jose Antonio dijo...

Ya se donde no tengo que ir de vacaciones.

jejejej

Gracias Jesús !

Fernando Pio dijo...

Para gustos, los colores; yo recomiendo la linterna SIPIK: http://dx.com/p/sipik-sk68-cree-q3-wc-120-lumen-convex-lens-led-flashlight-black-1-aa-1-14500-39585

El hecho de llevar zoom la hace muy util para proyectar la luz y alumbrar a distancia; y estoy de acuerdo contigo, si la Luftwaffe hubiera tenido estos focos, a los ingleses les hubiera costamdo más bombardear Alemania ;-)

Jesús Hernández dijo...

Sí, Fernando, tienes razón, esa SIPIK es también una excelente elección; de hecho, tengo tres, dos en negro y una en plateado.

Acaban de sacarla también en verde, rojo y azul, así que igual me las compro para completar la colección:

http://dx.com/p/sipik-cree-xr-e-q5-120lm-led-white-light-zoom-flashlight-w-clip-green-1-x-aa-141104?item=6