Bueno, amigos, pues dejemos aparcada por unos días la Guerra de Secesión, pese que veo que también os pone.
La verdad es que debería hablaros de la Primera Guerra Mundial, para promocionar en plan Umbral mi último libro, el
TODO LO QUE DEBE SABER SOBRE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL, pero me pasa lo de siempre, que cuando me entrevistan para hablar de mi último libro ya estoy enzarzado en otro que absorbe todo mi interés, y el otro libro ya me parece demasiado lejano y me da mucha pereza hablar de él. Pero bueno, a ver si la semana que viene os explico algo de la I Guerra Mundial, aunque parece que el libro se está vendiendo muy bien; ya me han dicho que en algún FNAC ya se han agotado todos los ejemplares.

Pues os voy a hablar del libro del que todo el mundo habla, lo más de lo más, lo último de lo último...
LAS BENÉVOLAS. ¿Cómo? ¿Que no has oído hablar de este libro? ¡No puede ser! Pues nada, ¡a enterarse!
Las benévolas, pese a un título tan disuasorio (parece de una novela costumbrista de Pérez Galdós) resulta que es uno de los mayores fenómenos literarios de los últimos meses. El libro, que aborda el Holocausto a través de un oficial de las SS, ha contado con una magnífica acogida de la crítica y ha vendido por ahora un millón de ejemplares.
El escritor Jorge Semprún ha dicho de él que es el "acontecimiento del siglo" y
Le Monde que es "uno de los libros más impresionantes que se han escrito nunca". En España lo edita RBA y vale 25 eurillos, tampoco se han pasado.
El autor, Jonathan Littell, nació en Nueva York en 1967 y creció en el sur de Francia. Ha estado en Rusia, en la antigua Yugoslavia, en Ruanda, en Afganistán y en Pakistán, como parte de su trabajo humanitario en la ONG
Acción contra el hambre. Actualmente reside en Barcelona para escapar del peso de la fama en Francia.
Pues bien, para estar a la última tenéis que leer este libro. Yo, por el momento, no lo pienso hacer; resulta que el libro de marras tiene 1.200 páginas (!) y la verdad es que tengo tantos libros pendientes que no puedo meterme con semejante mamotreto. Igual es muy bueno, como dicen los críticos, pero por ahora me va muy mal; si existe mucha presión social, como me pasó con el Código Da Vinci, igual lo pillo para el verano. Aquí tenéis una crítica de un pavo que se ve que sí, que se ha leído todo el libro, y que defiende la tesis de que sí, que está más o menos bien, pero que tampoco es para tanto.
Para los que no tengáis pensado leerlo pero queráis saber un poco de qué va, aquí podéis leer el primer capítulo. Yo ni siquiera he leído eso todavía; a ver si durante este puente tengo un ratillo y me pongo al menos a leer ese trozo, para que no se diga.
Pues eso, si hay alguno que se lo haya comprado y ya se haya puesto, que nos diga a ver qué tal, pero a mi me parece que es el típico libro que la gente se compra porque todo el mundo se lo compra pero luego no se atreve a decir que no le ha gustado (como el de La sombra del viento o La catedral del Mar), y si dicen que un millón de tíos lo han comprado (aunque me gustaría cuántos se lo han leído después), pues venga, no podemos ser menos.
Ojalá me equivoque y el libro esté muy bien. Ya diréis algo.